'La ciudad y el cuchillo', de Javier Fajarnés Durán


Fruto interior

Oculto cordilleras de sangre
en las manos cerradas
y en el centro del valle brota el palacio azul.
Palacio sin ventanas
ahogado por los múltiples astros,
extraño sosiego en sus galerías.

Deposito en mi corazón un blando paisaje,
bosque de breves incendios
donde alimenta la ceniza.

Animal, bebe el fruto de la ceniza,
retrocede hasta el fuego,
arde desde el interior.

La ciudad y el cuchillo, el segundo poemario de Javier Fajarnés Durán, profundiza en el corte y los derrumbamientos iniciados en Alud, pero Javier está tranquilo, «como tranquilas permanecen las celdas de luz; / como las uñas, tranquilas, / desgarran en las paredes sus últimos lenguajes».
Muy pronto, La ciudad y el cuchillo en Pregunta.